Mi nombre es man ls. (No, en serio, me he cambiado el nombre legalmente: ahora en mi documento nacional de identidad pone nombre: man, apellidos: ls -a
.) Trabajo en una consultora media-grande, de informática para más señas (llamémosla "Programalia", para abreviar). Tenemos la fauna usual de BOFHs, ingenieros tipo Dilbert y jefes pelo-pincho.
El rancho habitual es Microsoft, Microsoft y de postre Microsoft. La dirección estratégica habitual es, oh sorpresa: ASPs, Access y SQLServer cuando eres grande; añadiendo un poco de .NET para cubrirse las espaldas. Los de recursos humanos piden las habituales ensaladas: C "con" Oracle, Visual C++ "con" SQLServer, y a veces Java "con" Weblogic. (Vete a saber para qué ponen la preposición instrumental: es como si en una clínica pidieran Pulmón "con" Corazón, o en una banda Saxofón "con" Clarinete.) Es para despistar más que otra cosa, porque la postura oficial es que no se contrata.
Bien, pues la cosa está cambiando: en los planes estratégicos ahora aparecen las palabras mágicas "software libre". Hace unos meses, la empresa incluso co-patrocinó un congreso de software libre. (Perdonad que no ponga enlaces, pero por más que me meta con ellos, me pagan religiosamente todos los meses.) La idea era hacerle la pelota a las administraciones públicas, que están requiriendo cada vez más el uso de software libre -- e incluso de licencias open-source. Al que subscribe / unsubscribe, le tocó presentar una ponencia, ya que (por motivos que no vienen al caso) en mi departamento trabajamos con "esas cosas raras del opensurce". Sí, amigos, vuestro humilde servidor iba a compartir estrado con algunas luminarias (y muchas bombillitas) del movimiento de software libre. Sin embargo, en el último momento no pude asistir, por razones que tampoco vienen al caso.
Sí vienen al caso las declaraciones de la empresa: utilizamos a menudo software libre, estamos considerando internamente la migración a un puesto de trabajo open-source. No suena mal, sobre todo si en algún momento consigo que el ISA server corporativo me deje salir, y mejor todavía si habilitaran el correo IMAP. Porque yo sólo paso penurias con mi puesto Linux, de estranjis por supuesto. Pero mira que me parece raro, porque no había oído nada. Jum jum.
Hoy he asistido a la presentación de un plan para ampliar nuestra (nula) presencia en este intrigante mundillo de jipis y cripto-comunistas. Se basa en coaligar a entidades de todo tipo, para que compartan esfuerzos y desarrollen aplicaciones libres. Parece que éstos quieren aportar pasta, e incluso liberar algunos programas desarrollados internamente. Interesante, ¿no?
Sólo que está muy mal planteado. Como dicen los yanquis, el diablo está en los detalles. No voy a contarlo por lo menudo, porque el secreto profesional me lo impide -- así como el tamaño de los puños de mi jefe; pero no está claro quién desarrolla, qué beneficios específicos aporta, y sobre todo quién mantiene las cosas rodando. Ah amigos, aquí está el quid de la cuestión. Como se puede ver en sitios comunitarios del estilo de Libertonia, si se resuelven los pequeños detalles técnicos, la pasta es secundaria. Y esta gente es incapaz de ver otra cosa: deciden las cantidades antes de saber exactamente qué van a hacer.
Habría aceptado alegre un comunicado del estilo de "Programalia invierte un millón de céntimos de euro en el software libre", o "Programalia libera su programa de diseño de panderetas bajo licencia GPL". Es más, habría sido el primero en enviarla a BarraPunto -- para dar una oportunidad al personal para discutir si la licencia artística es realmente libre o no. Pero no, tienen que inventarse una cosa extraña en la que mayor parte de la inversión viene de otros, y que no se sabe muy bien para qué sirve. Con buena voluntad, ojo: están pensando en contribuir como pueden. Pero con poco conocimiento de causa.
[Aquí venía un panegírico sobre los valores de la comunidad, auto-censurado.]
Por último, y no menos importante: mis sospechas eran ciertas. Esos planes de migración eran una patraña. No sólo se van a seguir gastando una pasta en licencias de HaseCorp, sino que voy a seguir siendo el "gurú" del departamento. Cuando en realidad soy un puto novato, que ni siquiera sé hacer login en el dominio usando Samba. ¡Help!