Conversión CLI y atajos de teclado
|
|
Por atopos
departamento Mas-CLI-para-las-masas , Sección Diarios Puesto a las Mon Oct 6th, 2008 at 11:37:45 AM CET
|
|
Ya he visto que habéis respondio bastantes a mi entrada anterior y me ha alegrado comprobar que la CLI sigue estando tan viva como siempre. Con lo que mi conversión (o sea, mi regreso a la CLI) está más que amparado por la práctica libertoniana.
|
Al final incluso, aparte de las aplicaciones ya mencionados en el artículo previo(vim, mutt, newsbeuter), le estoy dando oportunidades a otras, en concreto a vifm, como gestor de archivos, que ya había usado anteriormente y a elinks, uno de los vástagos, de links, que también usé hace años, y que en su función de navegador web en modo texto, es el que más me gusta, por encima del venerable lynx y del algo confuso para mí w3m.
En realidad, la elección no es arbitraria. Aunque en elinks la configuración de teclas al estilo vi (que es la que a mí me interesa) es engorrosa, tanto que al final casi es preferible mantener la que hay por defecto, la interfaz es muy simple y las páginas multicolumna se suelen ver correctamente.
Mi preferencia por vifm tiene más que ver con su parentesco (en cuando a secuencias de teclado se refiere) con vi y también con su sencillez y simplicidad.
Y hablando de esto, el único escollo que encuentro a las aplicaciones de consola es justamente ese de los atajos de teclado. Ya sea porque a veces no es factible o resulta complicado configurarlos al gusto de uno, o porque al final el número de operaciones y su diversidad es tan grande que es prácticamente imposible encontrar un sistema uniforme, el caso es que uno acaba teniendo que aprender a cambiar de automatismos (más o menos, según la aplicación y según las configuraciones personalizadas, pero siempre algo) cuando cambia de programa.
Quizá alguno de vosotros tenga una solución para este difícil dilema. Será bien recibida, así como las configuraciones maravillosas que lo resuelven.
¡Ah!, si ya sé, ese problema está resuelto con emacs: en toda su gloria puede convertirse en la única aplicación del sistema. No sé si Stallmann llega a tanto. En todo caso yo prefiero no forzar tanto la mano y economizar los gestos. Una cosa por la otra. |
|
|