Efectivamente, cuando me llegó, vi que es un sistema Unix, con sus usuarios, sus permisos y toda la pesca, todo ello camuflado por el entorno gráfico. Con el sistema también vienen unas herramientas de programación, las Apple Developer Tools y como el compilador es un gcc 3.1, se me ocurrió que podría bajar software GNU y compilarlo en este sistema, quizá con algún cambio en el código... en fin, que me metí a investigar en Internet y... evidentemente ya estaba hecho.
Pues sí, para mi alegría ya hay un proyecto alojado en sourceforge que se encarga de portar y empaquetar software para poderlo instalar o compilar en
este sistema operativo. El proyecto se llama Fink y está ya muy avanzado, con más de 2500 paquetes preparados.
Fink tiene varias similitudes con debian, lo cual hace que mi intención de instalarle debian al portátil haya pasado a otro plano menos urgente. Por ejemplo, el sistema de paquetes es el .deb, se usa apt para instalar y desinstalar binarios, puedes bajar el código fuente, compilar y preparar el paquete a golpe de un simple comando, hay rama estable e inestable de la distribución, los paquetes están ubicados en servidores en Internet... en fin, que estoy como en casa.
Instalar y usar Fink es muy sencillo: se puede bajar el código fuente y compilarlo, pero lo vamos a hacer por la vía fácil, descargándolo como binario y después utilizando esa magnífica herramienta que es apt para instalar los paquetes que nos interesen.
Para empezar, necesitamos un sistema con MacOs X 10.2 o superior y conexión a Intenet, cuanto más rápida mejor. Descargamos el paquete desde la página de descarga, y haciendo doble click sobre el paquete, se monta y nos aparece el instalador. Otro doble click sobre el icono del instalador y se instala en el disco duro
. Por defecto fink instala todo lo suyo en /sw, y aunque se puede cambiar la ubicación, en la documentación nos recomiendan dejarlo así.
Pues ya está. Ahora ya podemos instalar software usando apt. Por ejemplo... queremos instalar slrn para leer las news... pues abrimos una consola y tecleamos:
% sudo apt-get update <--- esto actualiza la lista de paquetes
% sudo apt-get install slrn
nos pedirá la clave de administrador, y a partir de ahí veremos como se descarga el paquete, como se instala y configura... igualito que en una debian.
En esta imagen podemos ver al slrn en una ventana de MacOs X.
¿Y si queremos algo más fuerte? pues igual de fácil... por ejemplo, para instalar el KDE tendríamos que instalar las XFree86 y después los paquetes KDE.
Hay varias versiones de Xfree86 para instalar, pero lo mas cómodo es usar los propios paquetes de Fink. Para instalar las X 4.2.1 de Fink tecleamos:
% sudo apt-get install xfree86-base xfree86-base-shlibs xfree86-rootless xfree86-rootless-shlibs
Esto descargará e instalará las X en nuestro mac. Es de notar que hay una versión más moderna de las X, la 4.3 y que está en un sólo paquete llamado xfree86, pero yo no la he probado y estoy
trabajando con la 4.2.1
Una vez hecho esto, veremos que en el finder (algo así como un navegador de archivos) del mac, en el apartado de aplicaciones nos aparece una nueva aplicación con el icono de las X. Si hacemos doble click sobre ese icono se lanzan las X. El aspecto es bastante espartano, ya que el gestor de ventanas que aparece es el twm, pero eso nos confirma que se han instalado correctamente y
podemos seguir con la instalación del KDE. Para ello, y nuevamente desde una consola, tecleamos:
% sudo apt-get install bundle-kde kde-i18n-spanish
y después de bajarse un montón de megas de paquetes nos deja instalado un KDE 3.1.4 perfectamente funcional en nuestro sistema. Por supuesto, hay que modificar el fichero xinitrc de la distribución para que su última línea lance el kde:
/sw/bin/startkde
o mejor todavía, copiar ese archivo en nuestro home como .xinitrc y hacer ahí todos los cambios que queramos.
El aspecto se puede ver en estas dos imágenes:
Escritorio limpio
Escritorio con aplicaciones
Aunque está en inglés, la documentación de fink es muy clara y recomendable. Y para acabar, podéis ver la lista de paquetes de la distribución en este enlace.
En conclusión, Fink es una forma fácil y rápida de usar aplicaciones libres en MacOs X, pudiendo así aprovechar lo mejor de ambos mundos.