Amenazas y promesas de la era Interntet: Eco vs. Steiner
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Por atopos
departamento pensamientos libertonianos , Sección Internet Puesto a las Tue Oct 5th, 2004 at 04:27:17 PM CET
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A propósito de una entrevista de Umberto Eco en el periódico Die Zeit, que está siendo comentada ya en Barrapunto, quiero abrir un debate sobre la problemática planteada allí por el escritor italiano en relación con los peligros de Internet. Para enriquecer ese debate me parece interesante apelar a la reflexión que sobre el mismo tema ha propuesto otro pope de la cultura, George Steiner, en un libro suyo recientemente traducido al castellano y publicado por la editorial Siruela, titulado Lecciones de los maestros.
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Los que me conocen sabrán que algunos de esos temas ya fueron tratados en las dos primeras historias que he puesto en Libertonia. Mi intención es que el debate, basado ahora en dos visiones diferentes, sirva para definir aún más estas importantes cuestiones que nos afectan particularmente, como se verá enseguida.
Paso a citar los dos textos, o más bien una selección que hago de ellos. La traducción parcial de la entrevista de Eco es mía; el texto de Steiner lo cito de la traducción que para Siruela ha realizado María Condor (pág. 38-39) [Espero que la ediotorial sea condescendiente y no me persiga por la reproducción comentada de algunos fragmentos de su libro. Si los BOFHs de Libertonia piensan que infrinjo la legalidad, no teman es suprimir la historia. Es una pena tener que estar pensando en estas cosas.]
Vengan, pues, los textos, mis comentarios y añadidos van entre corchetes; las cursivas son mías.
Entrevista a Umberto Eco
[A propósito de la nueva novela de Eco "La misteriosa llama de la reina
Loana", que narra las peripecias de un hombre que ha perdido la
memoria tras despertar de un coma (no recuerda su nombre, ni quién es;
pero le vienen a la cabeza citas todas concernientes a la niebla),
dice el escritor lo siguiente:]
ECO: Cuando consulté los estudios sobre la ciencia del cerebro
[Gehirnforschung, no soy médico y desconozco si esta expresión tiene
una traducción técnica al castellano], me di cuenta de que existen
distintas formas de memoria. La "memoria automática", que permite
conducir un coche o atarse los zapatos. Otra forma distinta es la
denominada "memoria semántica", que es la memoria pública. La tercera
es la autobiográfica: sé quiénes son mis padres. He descubierto que
sólo se puede perder seguramente la memoria autobiográfica. Al
protagonista de mi novela le sucede justamente eso: no sabe quién es,
no reconoce ni a su mujer ni a sus hijos, pero se acuerda de toda su
cultura [Bildung]. La enciclopedia se abalanza sobre él como un
enjambre de abejas y tiene que deshacerse de ella.
DIE ZEIT: Porque le falta su yo como instancia ordenadora, ya no le
es útil el saber. ¿Existe, por tanto, la memoria para jerarquizar y
ordenar las experiencias?
ECO: Este es un problema [cuyo alcance] rebasa mi libro y está también
en relación con Internet. La memoria tiene dos funciones: conservar y
filtrar. Si no desechásemos la mitad de lo que aprendemos, nos
volveríamos locos. Hoy vivimos en una época en la que tenemos a
nuestra disposición más información que nunca. La enciclopedia es
infinita. Antes se nos ahorraba [lit. se nos quitaba (abgenommen)] la
tarea de filtrar. No sólo por medio de la censura, sino también porque
una editorial acogía determinados libros en su programa y no otros. La
cultura [Kultur], entendida como concepto antropológico, tuvo siempre
la función de filtro. Se debe saber cuándo murió Julio César, la fecha
de defunción de su esposa no es importante. En Internet esta
valoración [Wertung] se suprime. Hoy existe el peligro de que seis mil
millones de personas tengan seis mil millones de enciclopedias
distintas y ya no se entiendan en absoluto. A cuasa de lo cual:
Occidente contra el Islam, yo contra ti. Este es uno de los grandes
peligros del futuro.
El texto de Steiner
La escritura induce un descuido, una atrofia de las artes de la
memoria, pero la memoria es la "Madre de las Musas", el don humano que
hace posible todo aprendizaje [...] Ni el censor ni la policía pueden
arrancarnos el poema recordado [...]. Se sabe que en los campos de
exterminio algunos rabinos y estudiosos talmúdicos eran "libros
vivientes", cuyas páginas, que contenían la totalidad de sus
recuerdos, podían "pasar" otros prisioneros en busca de juicio o
consuelo. La gran literatura épica, los mitos fundacionales, comienzan
a declinar con el "progreso" del paso a la escritura. [Hasta aquí y en
lo que sigue, Steiner, en comentario a un famoso pasaje de Platón, no
hace sino recordar las consecuencias, ya estudiadas por otros del paso
de la oralidad a la escritura ---veánse, por ejemplo, los estudios de
Eric Havelock.]
En segundo lugar, la escritura detiene, inmoviliza el discurso. Hace
estático el libre juego del pensamiento [...] La palabra escrita no
escucha a quien la lee [Esta sola frase merece pasar al libro de los
mejores aforismos de la historia]. No tiene en cuenta sus preguntas y
objeciones. El libro pone su main morte [= mano muerta] sobre nuestra
atención. La auctoritas [= autoridad] surge de la autoría.
Una cosa fascinante [ahora viene lo que interesa para la discusión que
quiero proponer] es que los medios interactivos, susceptibles de
corrección e interrupción, [...] las textualidades electrónicas de
Internet y la Red, equivalen tal vez a una vuelta a la oralidad. Los
textos en pantalla son, en cierto sentido, provisionales y
abiertos. Estas condiciones pueden quizá restablecer los factores de
la auténtica enseñanza tal como Sócrates la cultivó [es decir, el
diálogo tête a tête con otros]. Al mismo tiempo, no obstante, el
alfabetismo electrónico, con su ilimitada capacidad de almacenamiento
y búsqueda de información [...] incide negativamente en la memoria. Y
el rostro que aparece en la pantalla no es nunca ese semblante vivo
que Platón y Levinas [Levinas funda toda su filosofía en el concepto
del rostro humano y del encuentro con el otro, en tanto otro, y por
tanto no asimilable al yo mismo, a través de ese rostro] juzgan
indispensable en todo encuentro fructífero [...]
Y ahora, en forma de preguntas, algunos puntos para enfocar el debate.
- Si aceptamos con Steiner (y con Socrates, por boca de Platón) la deficiencia de la escritura frente a la oralidad, es decir, de lo fijado por la auctoritas frente a lo que orgánicamente surge de lo colectivo en el diálogo, de la mano muerta del autor que no escucha frente al intercambio vivo de los que hablan, ¿no tenemos ya un primer argumento contra la tesis de Eco?
- ¿No habría que afinar más en el concepto de la "memoria pública" de Eco? ¿Existe diferencia entre el texto memorizado y la palabra no escrita, dicha por otro, y grabada en la memoria? ¿Es lo mismo aprender el nombre leído en el libro de Historia que el nombre de nuestro amigo o de nuestra madre? ¿Funciona aquí la memoria del mismo modo? O dicho de otra forma ¿existe diferencia entre la memoria que se asienta sobre el corpus de la cultura fijada en el texto y aquella que se transmite oralmente?
- ¿No es acaso la Kultur ---cultura que nace sólo desde la escritura---, en el sentido de Eco ---y piénsese en el papel que otorga a entidades externas, fuera del control colectivo--- una forma velada de imposición, de censura?
- ¿Es posible ahorrar al individuo la función de filtrar la información, sin hacer que éste pierda, ya de entrada, toda responsabilidad de juicio respecto del verdadero valor de lo así filtrado por terceros?
- ¿Es humanamente posible, por el contrario, cimentar una forma de cultura, cuando a cada individuo se le carga con el peso que supone la tarea ingente de filtrar?
- O, también en relación con lo anterior, ¿es posible el consenso allí donde no hay autoridades prefijadas que ejerzan esa función tutelar? ¿O estamos condenados, si sucede esto, ---como sugiere Eco--- a la diseminación de infinitos mundos inconmensurables e incomunicados: a una torre de Babel? ¿Existen o pueden existir otras formas de autorregulación en un mundo como el de Interntet que impidan la caída en el caos que Eco anuncia?
- ¿La nueva "oralidad" que ve Steiner en las formas de comunicación y creación que posibilitan las tecnologías actuales es, realmente, una oralidad; o la distancia de los cuerpos, de los rostros, es demasiado grande como para que el diálogo vivo se establezca realmente?
- Y finalmente ---dejo al resto que añada cuantos puntos quieran a esta lista--- ¿no tiene algo que decir el movimiento del SL y del conocimiento libre en estos temas?
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